C/ Castelló 18, 28001. Madrid. Tlfno: 915 75 28 66
Descripción general
Al principio de la Calle Castelló, muy cerca de Goya. La entrada es bastante pequeña y está pegado a otro restaurante que tiene bastante terraza en verano por lo que le hace un poco de «sombra». Al entrar hay una zona con mesas y una barra y al fondo, subiendo 3 escalones, está el comedor.
El servicio correcto, nada destacable.
Valoración de la comida
Carta con platos mediterráneos muy variados y con precios medios altos. Para empezar nosotros pedimos unos huevos de corral con chanquetes (10,50€). Ración bastante abundantes, los chanquetes no tienen mucho sabor y el plato es bastante pesado porque entre eso y los huevos fritos, es abundante. Muy destacables las patatas fritas en láminas con un punto muy bien conseguido.
También tomamos la tempura de verduras con salsa de mojo picón (9,60€). Está muy rica pero a mi para acompañar me gusta más salsa de soja porque el mojo le quita mucho sabor.
De plato principal pedimos las milhojas de vieiras y berenjenas con trigueros salteados (17,20€). Es el plato que más nos gustó. Ponen 3 vieiras grandes y muy tiernas y las berenjenas cortadas finitas envolviéndolas.
Y por último pedimos los tacos de solomillo ibéricos salteados con ajetes sobre carpaccio (12,80€), nada recomendables. El carpaccio es como si fuera la grasa del jamón y los tacos vienen muy aceitoso y con un sabor un poco fuerte así que el plato resulta muy pesado. No está nada bueno.
Todas las cantidades son muy abundantes, hay que pedir para compartir.
No tomamos postre ni vino.
Precio medio
30€ persona. Nos pareció bastante caro para la calidad de la comida.
Valoración
5/ 10
Ayer estuve comiendo en este restaurante con una amiga. Era nuestra primera vez, pero salimos bastante satisfechas. Todo lo que comí me gustó mucho, el wok de presa ibérica delicioso! El trato perfecto, no pudo ser mejor. Volveré!
La semana pasada fui a cenar con mi novio a este restaurante. Lo vimos hace tiempo y teníamos ganas de probarlo. Coca de sardina ahumada con pimientos asados y parmesano, hamburguesa de ternera gallega, y torrija caramelizada con helado de café. La hamburguesa estaba buenísima, y la torrija muy buena también. La coca de sardina fue lo que menos me gustó, aunque no estaba mala, por supuesto. El servicio extraordinario, sin quejas. Repetiremos.